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| Fotografía tomada desde el Cabezo de la Horca mirando al Cabezo de Puitiños. |
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Siguiente enlace pinchaaqui >robando los vasos sagrados, pisando las sagradas formas y sacrificando á un venerable sacerdote (quiso impedirlo el Cura de Epila, que murió á bayonetazos dentro de la Iglesia con el Copón en la mano.)<
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También nos cuenta Nuestro Amigo:Jose Luis Hernandez
En el 2008 se conmemoró el bicentenario con un conferencia de dos historiadores: el Epilense Francisco Lázaro y Herminio Lafoz. También se realizó un repique de campanas en recuerdo de los vecinos asesinados. PinchaAquiParaMasDocumentacion
Según nos cuenta Gonzalo Aguado Aguaron: El 22 de junio de 1808, habiéndose reunido en Épila el general Palafox y el Barón de Warsage con un pequeño contingente de tropas bisoñas, fueron briosamente atacados por el coronel Klopistki al frente de un numeroso destacamento enviado por Lefebvre. Duró el combate desde las siete y media de la noche del 22 hasta las ocho y media de la mañana del 23, acabando por la dispersión de nuestros voluntarios, todavía no acostumbrados á la lucha en campo abierto.
En este combate se distinguió Gálvez Cañero, que peleó ardientemente dando á sus soldados ejemplo de firmeza y serenidad, y en medio de la casi general dispersión, pudo retirarse ordenadamente con un considerable núcleo de fuerza y las cuatro piezas de artillería de la columna, dirigiéndose á los desfiladeros del puerto del Frasno á donde el enemigo no osó seguirle...
En el libro Guerra y Cuchillo de Daniel Aquillué nos cuentan pequeños detalles de lo ocurrido en Épila un ejemplo es que los dos cañones estaban dirigidos por Ignacio López y una treintena de Artilleros. Francisco Berdejo y su criado se encargaron de llevar los cañones con sus Mulas una de ellas moriría a causa de las balas Francesas...
Vicente Alonso, vecino de la Villa regaló a José Palafox dos Caballos enjaezados uno de los cuales llevaba toda la documentación bélica y política del Ejercito Español, este mismo Caballo se supone que tiraria al suelo al General al asustarse con el ruido del fuego en las escaramuzas...
El barón Warsage encargaría a Pedro Aguirre encontrar en tierras de Épila dicho caballo no hace falta mencionar el peligro que eso suponía toda una hazaña del mas arriesgado de los James Bond de hace mas de 214 años cumpliendo con sus cometidos ala perfección...
Dibujos decorativos de la fachada del antiguo Cuartel de Caballería de Épila, ubicado en la calle Cuartel,nº 28 edificio ahora mismo en venta. Según nos cuenta nuestro amigo Manuel Ballain Aured, este edificio estuvo la iglesia de San Juan, el primer edificio cristiano tras la toma de Épila por Alfonso I. Lo digo porque, en caso de derribo, obras, etc, sería pertinente una excavación arqueológica.
Escudo ubicado en la misma fachada del antiguo Cuartel de Caballería de Épila, donde se alojaban los miembros de Caballería de los Dragones del Rey.
Nos cuenta nuestro amigo Luis Capmartin: Antaño cuartel de Sementales..!
Escudo de armas: Se realiza el escudo en único bloque pétreo de arenisca resultando el conjunto heráldico dentro del grupo que catalogamos como de medianas dimensiones, se han tallado el campo, el timbre y los lambrequines, Su estado de conservación es optimo poco se ha erosionado la labra heráldica.
Campo; Es el clásico español acaudado por estar rematado en punta a modo de arco de medio punto al revés.
Medio cortado y partido
1º Cuartel; En azur, tres castillos, al natural mal ordenados ó alterados.
2º Cuartel; En oro, un ruejo (rueda) de molino acompañado de dos pinos, de sinople uno a cada lado y cuatro flores de lis, de azur, dispuestas en los cantones de campo.
3º Cuartel; En gules, una barra ancha (doble), de oro, acompañada, arriba de dos estrellas , de oro y abajo de otras dos estrellas del mismo metal, de siete rayos.
Timbrado: Pertenece a antiguos hidalgos ó nobles de tres líneas paternas y maternas ( de acero bruñido, puesta de perfil; esto es enteramente de lado, la visera abierta, y levantada, mostrando tres rexillas, clavadas como la bordura de oro y forradas de gules). La celada, con cuatro penachos que remata un perno lobulado, arrancando del interior las cuatro plumas con los colores del campo, que forman su airon. Está acamado el campo sobre una cartela confilaterias retorcidas y ornamento de vegetales.
Lambrequines; Se está en labra, aparecen dos "niños ángeles" ó amorcillos, actuando como tenates. Se muestran de cuerpo entero, sujetando la zalada, que sustentan el escudo por la mitad, con la mano y con la otra, el yelmo; de la punta del campo sale unas ramas con hojas, que subiendo hacia arriba cubren parte de sus cuerpos.
También nos cuenta nuestro Vecino Javier Mo Bos: El coronel polaco de la Legión de Vistula Jósef Chlopicki una vez retirado como general en Cracovia y al final de su vida, murió en 1854 perdió la cabeza y quemó sus memorias. Sólo pudieron salvar lo referente a la Batalla de Épila.
Fotografía de la Calle vieja de Èpila
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y se atribuía la facultad de cercarlas. Tal cerramiento de las fincas de dominio particular aparecía ratificado, «aun no estando materialmente amojonadas, cercadas o acotadas», en el artículo 15 de la antigua Ley de Caza de 10 enero 1879.
